Diez estrategias de Gestión de Riesgos para asegurar la Sostenibilidad Organizacional
29 mar 2022
Con el paso del tiempo, las organizaciones han venido aprendiendo que sus acciones directas e indirectas y sus efectos sobre su ecosistema, constituyen un valor apreciable que se retorna en beneficio propio en los “momentos de verdad”, como resultado de la confianza e imagen que genera la marca y en consecuencia la favorabilidad y la preferencia de sus clientes actuales y potenciales.
Hoy en día las organizaciones se ven afectadas por múltiples riesgos emergentes que se manifiestan incluso de manera concurrente. Riesgos antes no suficientemente contemplados como los generados por el cambio climático, la pérdida de biodiversidad, uso no sostenible de recursos naturales, afectación de los ecosistemas, cambios demográficos, desigualdades sociales y económicas, pandemia y ahora mismo la guerra, en un mundo globalizado, ya no son ajenos y causan efectos significativos en las economías de los países y en las organizaciones en toda escala.
Las nuevas realidades generan mayores potencialidades de riesgos, hacen a las compañías más vulnerables, lo que determina que ya no sea posible obviarlos y la necesidad imperiosa de contemplar y priorizar estas preocupaciones ante la inminencia de las afectaciones que pueden producir.
RIESGO DE SOSTENIBILIDAD Y LOS CRITERIOS ESG (ENVIRONMENTAL, SOCIAL AND GOVERNANCE)
El riesgo de sostenibilidad es conocido como: “la incertidumbre de poder sostener el crecimiento de una organización o sistema, debido a que ciertas prácticas pueden tener factores externos negativas que generan el deterioro de la cadena de valor del sistema durante un período de tiempo. o afectan otros sistemas relacionados en su entorno”.
Los criterios ESG están ligados a la sostenibilidad y se refieren a los factores Ambientales, Sociales y de Gobierno. Respectivamente: corresponden al efecto directo o indirecto de la actividad de la organización en el medio ambiente, al impacto en el entorno social y comunitario y al gobierno corporativo reflejado en las políticas de transparencia, en la ética de sus realizaciones, sus códigos de conducta y a la inversión y prácticas responsables en su actividad económica.
Los criterios ESG aplican a cabalidad en el ámbito empresarial y consideran el eficiente uso de los recursos y los efectos tanto para la compañía, como para la sociedad y el medio ambiente.
Es decir, que las compañías deben conservar y fortalecer el carácter misional, sus objetivos estratégicos y sin duda la maximización de sus utilidades y la rentabilidad de sus inversiones, pero en un adecuado balance que les permita generar bienestar para sus colaboradores, clientes, consumidores, usuarios y comunidad en general, con el debido cuidado de los impactos ambientales derivados del ejercicio de sus realizaciones, dándole a las organizaciones una connotación amplificada de los factores y las variables de interés, más allá del objetivo de rentabilidad económica.
Nota: Desde la perspectiva de país, a la sostenibilidad en ocasiones se le asocia una cuarta dimensión denominada: política, en relación con los factores de la democracia y gobernabilidad.
RIESGOS Y OPORTUNIDADES DE LA SOSTENIBILIDAD
El conjunto de riesgos en su diversa tipología son tratados normalmente por las empresas; de manera complementaria, los riesgos sociales y ambientales, más aquellos relacionados con la ética y responsabilidad afectan los diferentes niveles de la cadena de suministro y pueden ante una materialización de riesgos causar en cascada efectos tales como afectación de la marca, pérdidas significativas en las ventas, reclamaciones, multas y sanciones por incumplimiento o afectación de partes interesadas, comprometiendo la rentabilidad y hasta la propia existencia de las organizaciones.
Los riesgos de sostenibilidad deben entenderse desde la perspectiva de aquellos que se relacionan con los potenciales impactos negativos o positivos en sus tres criterios ESG, como el resultado de las determinaciones y acciones que realizan las organizaciones para cumplir con su objeto de negocio y sobre los cuáles se debe planificar para gestionarlos de manera anticipada, enfrentar los desafíos que ofrece el entorno y darles respuesta efectiva una vez se presentan.
La gestión de riesgos y el aprovechamiento de las oportunidades de sostenibilidad favorecen lograr negocios sostenibles y para ello es importante identificar adecuadamente mejoras en la productividad, reducir costos, disminuir los impactos en la operación y los problemas generados como consecuencia de ello. Se requiere entonces, implementar las mejores prácticas que le permitan a las empresas incrementar la productividad y rentabilidad teniendo en cuenta los factores ambientales y sociales, en lo que tiene que ver con la generación de productos y servicios más amigables con el medio ambiente, y el favorecimiento del bienestar del ecosistema con el que se interrelaciona, del que se beneficia; pero también impacta.
Identificar los riesgos ESG y agregarlos integralmente a la gestión de riesgos de una organización permitirá que sean tenidos en cuenta a nivel de la alta Dirección y se prioricen aquellos riesgos críticos. La gestión de estos riesgos, generalmente se relaciona con la generación de políticas, procedimientos y controles, desde lo estratégico hasta lo operativo, para tratar el riesgo de sostenibilidad y apoyar la toma de decisiones dentro de una empresa con una visión holística. Con este enfoque se tendrán en cuenta a nivel estratégico y se amplificarán al resto de la empresa, para todos los niveles, incorporándose en todos los procesos, servicios y proyectos de la compañía.
DIEZ ESTRATEGIAS DE GESTIÓN DE RIESGOS DE SOSTENIBILIDAD
Las organizaciones para planificar su crecimiento a largo plazo deben incorporar la gestión de riesgos de sostenibilidad. Esto implica planificar y tratar las responsabilidades sociales y ambientales. alineadas con las políticas y con los objetivos económicos y de rentabilidad.
Para una adecuada gestión, se deben definir estrategias con propósitos orientados a los riesgos asociados a estos tres factores. A continuación, se presentan 10 estrategias que deben ser diseñadas e implementadas con concepción armónica e integral:
- Estrategia de mejora para los productos y servicios actuales y para el desarrollo de nuevos, incluyendo los factores de sostenibilidad con soporte de tecnologías de nueva generación, que proporcionen una mayor competitividad y desarrollo del negocio, a través de la innovación, participación y promoción en los dominios actuales con ampliación a nuevos campos del mercado.
- Estrategia de adopción de marcos de referencias, metodologías y procesos estándar siguiendo mejores prácticas de gestión de riesgos de la sostenibilidad asistidas por software especializado y uso de nuevas tecnologías, que faciliten la identificación temprana y la gestión de factores adversos y oportunidades para los procesos, servicios y proyectos actuales y futuros.
- Debe realizarse una estrategia de buenas prácticas laborales, dirigida a preservar la salud (incluida la mental), seguridad y bienestar de los empleados y colaboradores, en especial cuando se ven amenazadas por riesgos potenciales que atentan contra las personas y las sedes donde ellos laboran. (riesgos pandémicos, biomecánicos, químicos, eléctricos, biológicos, naturales, psicosociales, públicos, etc.).
- Estrategia para asegurar cumplimientos a lo regulatorio, leyes y normativas de control referidos a la sostenibilidad.
- Estrategia de desarrollo y mejora de las capacidades para la atención de emergencias y desastres, continuidad del negocio y resiliencia tanto operacional como organizacional.
- Una estrategia importante es la de asegurar que los proveedores y aliados tengan a su vez gestión para la sostenibilidad y que sus valores estén preferentemente alineados o por lo menos no riñan con los propios de la organización.
- Estrategias ambientales de reducción de emisiones, manejo integral de residuos, iniciativa de eficiencia energética, protección del medio ambiente y atención de los impactos ambientales negativos y de las afectaciones a las comunidades, posiblemente lesionadas directa o indirectamente por la acción u omisión de prácticas y/o proyectos de compañía.
- Determinar frentes de acción transversales alineados entre sí: que pueden funcionar a través de Comités y Subcomités, tales como el de ética, cultura de desarrollo sostenible y responsabilidad social, cadena de suministro, seguridad, medio ambiente y el de creación de valor social.
- Estrategia de comunicaciones con el foco de protección y promoción de la marca basados en criterios de sostenibilidad.
- Estrategias visibles de apoyo y en procura de los 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de la ONU y en consonancia con los esfuerzos y metas a nivel país y región.
ECOSISTEMA DE GESTIÓN DE RIESGOS DE SOSTENIBILIDAD ORGANIZACIONAL
La siguiente figura nos muestra el ecosistema de la gestión de los riesgos de sostenibilidad organizacional, de ella se destaca la importancia de contar con un diagnóstico (análisis de materialidad y de contexto) a partir de los requerimientos, requisitos y expectativas de las partes interesadas, con referencia a los objetivos de desarrollo sostenible (ODS) de las Naciones Unidas para identificar los riesgos y oportunidades de la sostenibilidad, como entrada para la definición de estrategias propias de la sostenibilidad alineadas siempre a los objetivos estratégicos de compañía. La cultura y conciencia, la investigación + Desarrollo + innovación, las nuevas tecnologías y el seguimiento de buenas prácticas serán factores claves en la gestión de los riesgos de sostenibilidad.
El tratamiento efectivo de los riesgos negativos y positivos (aprovechamiento de las oportunidades), permiten generan nuevas capacidades, cambios en los métodos productivos, optimización de la cadena organizacional, mejora o generación de nuevos productos y servicios y en últimas la generación de valor para la compañía, expansión, crecimiento y prosperidad. Los beneficios percibidos en su ecosistema facilitan de manera cíclica la resiliencia y sostenibilidad.
SOSTENIBILIDAD Y RESILIENCIA
Hoy día, la gestión del riesgo de la sostenibilidad y la resiliencia están en la agenda de las organizaciones de clase mundial. La madurez y grado de conciencia de ellas fortalecen y contribuyen a la transformación del mundo para eliminar la pobreza extrema y posibilitan prosperar, generar bienestar y convivir en paz y armonía con el ecosistema en el que se desenvuelven.
De manera simplificada, la sostenibilidad organizacional está referida al mejor desempeño corporativo considerando los impactos sobre su entorno, en tanto que resiliencia se refiere a generar las condiciones y capacidades de la organización al enfrentar exitosamente los riesgos internos y del entorno sobre la empresa, para asegurar su supervivencia y prosperidad.
Las estrategias y las acciones que se realicen en los dos frentes son compatibles y complementarias y deben considerarse en la estrategia general de una organización, referidos a su propio ámbito y entorno.
La sostenibilidad y resiliencia a pesar de sus particularidades, de hecho, tienen elementos comunes como asegurar la viabilidad de la empresa en el largo plazo, que hace que trabajar en un sentido se apoye y estimule el desarrollo del otro. Los esfuerzos en sostenibilidad y sus objetivos sobre el entorno, en últimas, favorecen el desarrollo de las capacidades organizacionales y aumentan la confianza y preferencia de las partes interesadas para asegurar la existencia, el bienestar y la prosperidad, factores claves de la resiliencia. Y a su vez, los desarrollos efectuados de manera responsable para fortalecer la resiliencia permiten la sostenibilidad.
EL REPORTE DE SOSTENIBILIDAD
Los reportes de sostenibilidad hacen que los resultados de todos los esfuerzos para gestionar los riesgos que afectan la sostenibilidad de las organizaciones sean visibles ante las partes interesadas, la comunidad y el público en general. Así mismo, constituyen el registro para evidenciar y difundir las actividades sobre los productos y servicios corporativos que cuidan e incluso crean impactos positivos en lo ambiental y social. Con ello se genera un mayor valor de la marca y una recordación positiva de ella, se aumenta el compromiso y motivación de sus colaboradores; así como se logra una mayor aceptación de la opinión pública y se gana en la confianza y preferencia de clientes, consumidores y comunidad en general.
Es importante que los reportes de sostenibilidad incluyan elementos que evidencien valores corporativos tales como la solidaridad, la inclusión, transparencia, oportunidad y pertinencia, la debida diligencia, el actuar positivo y el desempeño exitoso de lo corporativo sobre el bienestar colectivo.
RECOMENDACIONES
A continuación, se relacionan algunas recomendaciones complementarias:
- Viabilizar una concepción holística del crecimiento armónico y equilibrado en lo económico, social y ambiental. para generar un impacto positivo en el entorno de manera tal que agregue valor a la organización y a sus partes interesadas.
- Contribuir a la mitigación de los efectos negativos del cambio climático y las posibles afectaciones generadas por la operación de la empresa en cumplimiento de su misión.
- El enfoque de sostenibilidad debe ser tenido en cuenta en la formulación de las estrategias de negocio de la organización.
- Asegurar la alineación estrecha entre el pensamiento gerencial sostenible, el comportamiento de los colaboradores, la operación de la empresa, el cuidado del ambiente y el bienestar de la comunidad.
- Gestionar con innovación los riesgos ante las oportunidades y retos derivados de los cambios en el entorno y los nuevos desafíos que él le ofrece.
- Implementar en el diario vivir de las empresas el uso de buenas prácticas laborales, derechos humanos, inclusión y las muy conocidas de salud y seguridad.
- Aplicar estándares internacionales y criterios específicos de excelencia, propios del sector o Industria al que se pertenece.
German Vargas es ingeniero de sistemas y consultor internacional en Mejores Prácticas Tecnológias y de Negocio con experiencia en gerenciamiento de áreas de TI de grandes compañías como ALPINA, IGAC y de Auditoría/Control Interno en BAVARIA, TIGO, AVANTEL y DIAN. Actualmente en CLARO como Business Continuity/Compliance Manager.